Vinos de Lanzarote, esencia de volcán en tu copa

Ingenio, tesón y originalidad, son las tres virtudes que hacen posible el fomento de la viticultura en Lanzarote, una isla con clima subdesértico agudizado por los abrasadores vientos saharianos y en una tierra volcánica. 

La noche del jueves tuve el placer de asistir a una exquisita cena para influencers maridada con algunos de los mejores caldos de esta isla gracias a la invitación que el Consejo Regulador de la Denominación de Origen de Vinos de Lanzarote nos hizo llegar a mi amiga la lanzaroteña Yara de León y a mí. El encuentro tuvo lugar en uno de los mejores restaurantes de Las Palmas de Gran Canaria, The Cavern Suite, premiado con Certificado de Excelencia por Tripadvisor en 2015.

Estos días ya han visto publicaciones en mis redes sociales  y pueden encontrar muchas más con el hastag #DOLanzarote.

Con nosotros, como anfitriona, estuvo Nereida Pérez, técnico del Consejo Regulador y una eminencia en el conocimiento del cultivo de la uva y la elaboración de los caldos de Lanzarote. Ella fue la encargada de contarnos todas las particularidades y curiosidades que les iré desgranando a continuación.

Antes de adentrarnos en la velada, quiero hablarles un 
poquito del secreto de los vinos de Lanzarote. La viticultura heroica en Lanzarote propicia los viñedos más singulares de España. Es imposible no sorprenderse ante ese paisaje con viñas enterradas en zocos y protegidas por muros de piedra, otra de las peculiaridades que exigen cuidados todo el año. Esta forma de cultivo no permite maquinaria, por lo que el trabajo es aún más laborioso ya que se realiza de manera manual.

Para comenzar a degustar los entrantes del menú, el sabor de una uva única en el mundo, la Malvasía Volcánica. Los vinos de esta isla tienen un sabor volcánico-mineral muy marcado y perfectamente equilibrado con su acidez, relativamente alta. El primero que descorchamos fue un Blanco Malvasía Volcánica Seco 2015 de Bodegas la Grieta.

Otro de los caldos del maridaje de los entrantes fue un vino Blanco Malvasía Volcánica Seco 2015 de Bodega Vulcano. Me sorprendió bastante, pues era más ácido, por lo que se servía aún más fresco. Su aroma a flores y fruta lo hacen realmente singular. Sin embargo, como los gustos es algo tan personal, a mí me gustó más el primero que probamos de La Grieta, pues es un vino cuyo sabor en boca perdura más. 

Aquí tienen una instantánea con Frank Vidal, gerente del restaurante The Cavern Suite.

Llega el momento del plato principal, yo escogí carne; solomillo de cerdo relleno con confit de ciruela y jamón mallorquín, una delicia de plato que degustamos con un tinto de 2015, con el vino de la caldera milagrosa, Guiguan, situada en Tinajo y que forma parte del Consejo Regulador de la D.O. Vinos de Lanzarote desde 2006. 

El tinto tradicional de Bodegas Guiguan es un vino obtenido del Listan Negro, una variedad de uva que destaca por su aroma a fruta roja sobre fondo mineral, en boca es envolvente, perfecto para acompañar a la carne.

Por supuesto, nos queda el postre, una tarta de chocolate acompañada de fresas, frambuesas y virutas de naranja. 

Para acompañarlo, un vino de licor elaborado a partir de la variedad de Moscatel, en concreto Los Perdomos Moscatel dulce 2012 de Bodegas Reymar, un vino que obtuvo medalla de oro en el concurso oficial Agrocanarias. Bodegas Reymar se fundó en 1995, tiene una producción anual de 32.000 botellas y se encuentra en la Plaza de los Dolores, en Tinajo.

Como ya estarán imaginando la cena va llegando a su fin, así que, aquí tienen una foto de familia con los asistentes.

Antes de despedirme de ustedes quería compartir un pequeño texto escrito por Yara de León, otro de los "tesoros" de esa pequeña isla.

Por Yara de León

Nací en Lanzarote, en el seno de una familia de agricultores, de trabajadores del campo, como me gusta decir. Mi padre, Agustín de León, creció y vivió en el pequeño pueblo de Soo. Dedicó su vida, hasta su muerte temprana, al campo y a la familia. Cultivó tomates, batatas, cebollas, y por supuesto, las apreciadas sandías de Soo.

Y no fue fácil.

He crecido escuchando que “la tierra de Lanzarote es muy agradecida”. Que todo lo que plantas, crece..Y vaya si lo es. La tierra es sabia y es agradecida. El campo de Lanzarote ha sabido reconocer con sus frutos, el trabajo de tantos hombres y mujeres que pasaron la mayor parte de sus vidas en el enarenado. Arando bajo un sol abrasador, desafiando las escasas lluvias, y por si eso fuera poco, combatiendo también, las erupciones volcánicas. 

Amo profundamente mi tierra, mis raíces, mi campo…Y amo todo lo que en ella nace. Amar el vino de Lanzarote, es comprender la dedicación y la entrega de generaciones de isleños. Amar el vino de Lanzarote, es reivindicar con orgullo la exclusividad de nuestra forma de cultivo. Amar el vino de Lanzarote es amar el paisaje, es amar La Geria.

Por eso celebro cada una de las ocasiones en las que puedo compartir una mesa, una charla, un encuentro, con una copa de vino de Lanzarote, y degustar  la calidad de ese caldo. Es, a mi modo de ver, el mejor homenaje que podemos rendir a nuestros antepasados, y reconocer así su legado. Porque fueron capaces de ver en cada adversidad, una oportunidad. Porque fueron capaces de renacer de sus propias cenizas, las del volcán. Y porque he crecido escuchando que “la vida en el campo no fue fácil”.

Gracias al C.R.D.O. Vinos de Lanzarote, por invitarme a formar parte de su mesa. En especial, a Nereida Pérez por compartir su pasión, y su sabiduría.

Recuerden que este domingo 15 de mayo en el Mercado del Puerto de Las Palmas de Gran Canaria a partir de las doce del mediodía se estrena en la isla "Sonidos Líquidos", un festival único que marida vinos de Lanzarote, gastronomía y música independiente. Furia Trinidad es el grupo con el que Sonidos Líquidos llega a Gran Canaria, una banda afincada en el Puerto Santa María cuyo sonido remite al público al desierto de Texas con México como si en una peli de Tarantino estuviésemos. 

¡No se lo pierdan amig@s cachivacher@s! ¡Feliz fin de semana!